Día del Sobregiro de la Tierra: 100 días de posibilidades para mover la fecha
El 29 de julio de 2021 fue el Día del Sobregiro de la Tierra. Esta fecha marca el momento en que la demanda de recursos y servicios ecológicos por parte de la humanidad en un año determinado supera lo que la Tierra puede regenerar ese mismo año. Para garantizar un futuro próspero a nuestras sociedades, tenemos que desplazar esa fecha y para ello no existe una única solución mágica, sino más bien un mosaico de soluciones ampliamente aplicadas, en conjunto.

Salvo la tendencia invertida observada el año pasadocuando el Día del Sobregiro de la Tierra cayó el 22 de agosto y principalmente por catástrofes (debido al COVID-19), el Día del Sobregiro de la Tierra ha llegado cada vez más pronto cada año, aproximadamente un mes antes cada década desde su primera manifestación en los años setenta. Esto es indicativo de la creciente demanda humana (de alimentos y fibras vegetales, productos ganaderos y pesqueros, madera y otros productos forestales, espacio para infraestructuras urbanas y bosques para absorber las emisiones de dióxido de carbono de los combustibles fósiles) de los recursos del planeta, que equivale actualmente a unos 1,7 planetas de recursos y servicios ecológicos.
Existen innumerables soluciones y esta necesidad de muchas respuestas diferentes está bien representada por la Campaña "100 días de posibilidadespromovido por Global Footprint Network, ofreciendo una solución al día desde el 29 de julio hasta el comienzo de la COP26. La idea era poner de relieve alternativas a las actuales formas de funcionamiento de nuestras sociedades en los días previos al que iba a ser el acontecimiento más importante de este año. Muchas de las soluciones recogidas para la campaña son la prueba de que existen alternativas y de que podrían ampliarse si existiera la voluntad política de hacerlo. Dado que los poderes políticos parecen subestimar la crisis climática, es más importante que nunca sacar a la luz este tipo de proyectos y darles visibilidad ante el mayor número de personas posible.
La forma en que producimos y consumimos alimentos tiene un gran impacto en el medio ambiente y un papel clave en esta lucha.
Como ha demostrado nuestro pasado reciente, alrededor de 50% de dicha demanda humana sobre los recursos del planeta se debe a nuestra sistemas alimentarioses decir, la forma en que producimos, transportamos, distribuimos, consumimos y, por desgracia, desperdiciamos los alimentos. Cambiar nuestro enfoque hacia sistemas alimentarios más sostenibles ayudaría a adelantar la fecha en la que los seres humanos superemos lo que los recursos mundiales pueden sostener en un solo año. También en este caso, hay distintas formas de conseguirlo, como comer localmente, cultivar de forma sostenible (por ejemplo, mediante prácticas agroforestales) o reducir el desperdicio de alimentos.
Esto es exactamente lo que pretende conseguir el proyecto Foodnected.
Los sistemas alimentarios de cadena corta, justos y sostenibles que estamos realizando a través de la Comunidad de Práctica Foodnected son una de las soluciones. Practicar un código ético de valores medioambientales y sociales, utilizar sistemas de producción de bajo impacto y reconectar a productores y consumidores (reduciendo la distancia entre ellos) ayuda a trastocar los mecanismos imperantes en el mercado alimentario. Y, de hecho, una Comunidad de Prácticas (CoP) conecta a productores y consumidores de alimentos a pequeña escala bajo valores compartidos para facilitar el desarrollo de sistemas alimentarios sostenibles y de cadena corta que funcionen para la naturaleza y las personas, empezando por la región mediterránea.
El sector ganadero es sin duda uno de los más importantes dada su contribución a las emisiones de GEI, así como al uso de la tierra y el agua, en todo el mundo. Por tanto, es un lugar obvio por el que empezar.
El 29 de octubre, la solución fue la promoción de métodos de producción de carne de vacuno que se centran en la integración del ganado en un paisaje mixto local, como las pequeñas explotaciones de Menorca Custòdia Agrària programaparte del programa Foodnected. Estas explotaciones aprovechan el paisaje heterogéneo (que combina tierras de cultivo con zonas de vegetación silvestre) para la producción agrícola. El ganado se alimenta en parte de pastos silvestres y camina entre zonas boscosas. Esto permite capturar importantes cantidades de dióxido de carbono. Además, el tipo de gestión practicado no agota la biodiversidad, sino que la fomenta.
La Huella Ecológica es una herramienta utilizada para medir cuánta naturaleza tenemos y cuánta naturaleza utilizamos. El consumo de alimentos en todo el mundo contribuye a cerca de 26% de la Huella Ecológica de la humanidad. Al trabajar con el entorno local y aplicar prácticas de gestión beneficiosas, el consumo de carne justa y local producida en las granjas de Custòdia Agrària ayudaría a reducir la Huella del consumo de carne de vacuno en hasta 64% en comparación con la carne de vacuno producida de forma convencional. Aplicados en todo el mundo, los métodos de producción de Custòdia Agrària retrasarían 5 días la fecha del Día del Sobregiro de la Tierra.
Estas prácticas fomentan el desarrollo local en sus territorios con nuevos modelos de gobernanza que implican y responsabilizan a todas las partes interesadas locales con un enfoque comunitario y participativo. Esto anima a los pequeños productores a convertirse en agentes del cambio para la necesaria transición hacia sistemas alimentarios sostenibles y justos. La creatividad y la creación de redes promueven el intercambio de conocimientos, la comprensión colectiva y la tutoría necesarias para construir un futuro mejor, lo que conduce a la innovación, la creatividad y el emprendimiento social.
Todos podemos hacer algo para combatir el cambio climático y la sobreexplotación de los recursos y, en última instancia, aplazar el Día del Sobregiro de la Tierra. Podemos empezar por tomar conciencia de nuestro propio impacto ambiental. ¿Quieres medir el tuyo? aquí?
